Tal y como tenían previsto, y con la colaboración de la Concejalía de Fiestas del Ayuntamiento alhameño, Manuel Cara y Pablo Ruiz, pusieron el toque musical llenando la tarde-noche de sonidos, y pintando el cielo de colores gracias a la magia de la pirotecnia, todo ello como habían anunciado para celebrar tanto el paso a lo que se ha llamado ‘nueva normalidad’ como para homenajear a todos los que de una u otra manera nos han ayudado a sobrellevar estos meses de confinamiento, tanto voluntarios como los que han tenido que trabajar para que funcionaran los servicios que nos han mantenido a salvo en nuestras casas.
A las 9 de la noche del domingo 21 de junio de 2020, con el verano recién estrenado, comenzaba la música, que se prolongó un par de horas, y, a la puesta de sol, 22:15 h., el castillo de fuegos artificiales, donde tras él, se volvieron escuchar las palmas espontáneas que durante este tiempo fueron el símbolo de la gratitud ciudadana, y, en este caso, de gratitud igualmente para Pablo y Manuel que han formado parte de esa tradición diaria que se generó en esta situación tan atípica que hemos vivido, y que seguimos viviendo, y donde se sigue pidiendo la responsabilidad de todos para no volver a tener que repetir la experiencia porque no pongamos de nuestra parte en que el virus no se siga propagando hasta que no haya una solución sanitaria definitiva al respecto.
Gracias, Manuel, gracias Pablo, gracias Alhama, ejemplo de solidaridad en estos duros momentos.
Gracias, Manuel, gracias Pablo, gracias Alhama, ejemplo de solidaridad en estos duros momentos.
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